Don Raúl Blin Necochea, ViceRector del Instituto Nacional
Doña Carolina Toha Morales, Alcaldesa de la comuna de Santiago
Padres, apoderados, amigos y compañeros
Autoridades Varias y Vagas
Antes de comenzar a leer estas líneas, con motivo de la Licenciatura de los Cuartos medios 2012, mi generación, me gustaría pedir perdón. Perdón a quienes después de revisar un discurso que yo envíe semanas atras, me autorizaron y dieron la oportunidad de leerlo aquí frente a ustedes.
Disculpas porque las páginas que hoy leeré, son distintas a las de ese borrador. De otra forma no me hubieran dejado hacer este discurso. Disculpas y espero puedan entenderme.
- ¿Qué digo?
- ¿Cómo, en cinco minutos, resumir mi paso por este colegio?
- ¿Cómo, en un discurso, intentar plasmar siquiera en su uno por ciento, la gama de sentimientos que poseo hacía El Nacional?
- ¿Cómo redactar algo, lo suficientemente digno para tan importante día?
Luego, tras la ofensiva de la Corona española por recuperar sus posesiones en América, e identificando al Instituto Nacional como un símbolo de la soberanía y la lucha por la emancipación, deciden clausurarlo. Bernardo O'higgins, cinco años después, con la Independencia ya asegurada, lo reabre para seguir funcionando, sin interrupción, hasta nuestros días.
Así como en la televisión, advierto: Las opiniones vertidas en este discurso no representan necesariamente el sentir de mi curso, familia, amigos ni colegio. Este discurso me represente a mí y solo a mí. Yo soy su único responsable.
Un año antes del famoso Bicentenario. Hace 6 años me dio tristeza e incluso, un poco en broma un poco en serio, pensé que sería una buena opción repetir para ser parte de la "Generación Bicentenario". Hoy, con la perspectiva que el tiempo me ha dado, considero como un símbolo de mi paso por este colegio el salir un año antes de la Gran Fiesta: nunca me he sentido lo suficientemente Institutano como para soportar un año entero de chovinismo Institutano. Incluso, fue uno de los argumentos a favor cuando decidí pasar de curso el año pasado, el no estar aquí para el bicentenario. ¿Por qué?
Sin embargo, luego de que en el preuniversitario me pasaran Historia de Chile (en el colegio no la vi más de un mes), reconozco que la profesora obvió el contarnos varios detalles.
También a mi profesora se le olvidó mencionar que Institutano fue Germán Riesco Errázuriz, presidente de la República en el periodo del auge de la "Cuestión Social" destacando la matanza a raíz de la Huelga de la Carne, la cual dejó un saldo de más de 300 muertos en las calles del centro de Santiago. Previamente, destacan dos tristes hechos en la historia de Chile en que Institutanos también han sido actores principales. Fue un Institutano Manuel Bulnes Prieto, quien sofocó la Revolución Liberal de la Sociedad de la Igualdad, causando decenas de bajas. Fue Institutano también, Anibal Pinto, presidente de Chile, quien nos condujo a una absurda guerra contra nuestros hermanos peruanos y bolivianos por intereses oligarcas. Esta guerra, la Guerra del Pacífico, causó 3 mil bajas en Chile y más de 10 mil bajas en los países vecinos.
Conocida es su frase: "Palos y bizcochuelos, justa y oportunamente administrados, son los específicos con los que se cura cualquier pueblo, por arraigadas que sean sus malas costumbres.".
Ojalá el número de presidentes Institutanos no crezca hasta los 19. Me daría vergüenza que Laurence Golborne, un Institutano que hasta hace 3 años era Gerente General de Cencosud, (a saber: Jumbo, Paris, Santa Isabel, Costanera Center, entre otros) consorcio que paga $4.072 de patente al año, fuera presidente de Chile.
- ¿A qué clase de profesor se le puede pasar por la cabeza decirle eso a niños de 12 años?
- ¿Por qué intentar separar al Instituano del humano común y corriente?
- ¿Tan inteligentes somos?
¿Cómo se le explica a alguien que obtuvo 500 puntos ponderados en la PSU?
Y que salió con un NEM y un Ranking por debajo de la media nacional.
Un éxito aparente eso sí, un éxito centrado sólo en lo económico: ser puntaje nacional, estudiar una carrera tradicional, casarse, escalar lo más alto posible en la empresa, comprarse una camioneta para pegarle la insignia del instituto en el parabrisas.
Como dirían los Fabulosos Cadillacs: "En la escuela nos enseñan a memorizar: fecha de batallas pero que poco nos enseñan de amor". Amor a lo que hacemos, amor al prójimo, amor a la clase o incluso a la humanidad. No, nada de eso. Sólo buenos puntajes para el día de mañana comprarse la camioneta 4×4.
Personalmente, no es ningún orgullo ser el colegio más odiado de los "emblemáticos" (y no me trago el cuento que nos decían los profesores que es porque somos los más inteligentes o los con mejores pololas) es porque de una u otra manera de verdad creemos que nosotros no nos equivocamos: porque somos Institutanos.
¿Qué actividad se puede desempeñar solo? Ninguna. Nos educan en una burbuja idílica.
Si todos hemos sido testigos de horrorosas frases estilo: "corran como hombres, no como maricones" "asuman sus consecuencias como machitos" "al colegio se viene solamente a estudiar" o "dejen la población en la casa" ¿Son acaso estas frases las que corresponden a un colegio que se jacta de estar forjado sobre los valores de la ilustración? No lo creo.
A propósito de los mismo, yo personalmente no he sido testigo, y tengo la impresión que es una conducta que va en retirada, pero hasta hace sólo un par de años, era común ver a un respetado y sacralizado profesor de este colegio, echando alumnos de la sala por negro.
O suspendiendo aleatoriamente (Hacía formarse a un curso y decía: un, dos, tres: suspendido. Un, dos, tres: suspendido) sólo para demostrar su hipotético poder en este colegio. Ahora bien, de lo que sí he sido testigo, es de tratos abiertamente homofóbicos por parte de profesores hacia compañeros homosexuales: "Este colegio por gente como ustedes está como está, váyanse" y, en la misma línea he sido testigo de de profesores pegándole a compañeros (no combos ni patadas, pero sí empujones)
Si la educación en Chile fuera buena en todos los establecimientos educacionales ¿Qué motivo habría para la existencia del Instituto Nacional? Ninguna.
Si mi antiguo colegio me hubiese ofrecido la misma calidad de enseñanza que el nacional, yo no me hubiera cambiado. Pero me cambié porque no la ofrecía.
Entonces, ¿Cómo sentirme orgulloso de haber dejado a 40 ex compañeros pateando piedras en mi ex colegio, para yo venir y "salvarme" de no patear -tantas- piedras? La sola idea suena aberrante.
El símbolo del lucro en la educación firmando un convenio con el símbolo de la educación pública.
Es así como el CEPAIN lleva a la práctica sus comunicados "¿a favor de la educación pública? ¿Quién los autorizó para usar el nombre del colegio, a quién le preguntaron?" Patético.
Parece que era más importante las Batallas Napoleónicas en historia común y la Ley de oferta y demanda en historia electivo que las bombas de ruido que se escuchaban explotar en el colegio a esas horas de la mañana. Comentando con unos compañeros en el recreo la situación, recordamos que nunca, en los 6 años que llevamos en el colegio nos pasaron el Golpe de Estado (donde, paradójicamente, murió un Presidente Instituano).
Es decir, haciendo el experimento que yo sólo sepa lo que me han pasado en el colegio y nada más, no sabría quién fue Augusto Pinochet en la historia de Chile. Repito: Cuarto medio humanista en el mejor colegio de Chile.
Y es porque dentro de todo lo yermo aun existen pequeños oasis fértiles. Profesores en los que se puede confiar una palabra más allá de la materia oficial, profesores que entienden la educación más que como un "motor de asenso social" y que conciben al colegio más que como un preuniversitario de 6 años. Profesores de materias "no-psu" que luchan día a día contra el sistema para darle dignidad a su ramo.
Y creo que lo logran, sus ramos son los más dignos de todos. Pedro Lemebel, un escritor chileno en una crónica rememorando sus años en el Liceo Manuel Barros Borgoño lo describe mejor que yo, cito: "Pero rescato de ese liceo, las clases progresistas que me enseñaron política, filosofía, literatura, poesía y otras lecturas más allá del horroroso Quijote en papel de biblia que después me lo fumé entero".
No daré nombres, pues sé como funcionan las cosas en este colegio y no quiero que vinculen a ningún profesor con este discurso, pero estoy seguro que ellos saben quiénes son.
Muchas gracias
Presidente del 4to F Humanista del Instituto Nacional
Ex alumnos valoran discurso del joven egresado
Con motivo de la graduación de 4º medio del Instituto Nacional, el alumno Benjamín González realizó un discurso que ha generado gran revuelo. Cambio21 conversó con algunos ex Institutanos quienes resaltaron el valor del alumno.
El Instituto Nacional o el Liceo1 "Javiera Carrera" son algunos ejemplos de estos establecimientos, de los cuales sus egresados se sienten orgullosos y es algo que te marca para siempre, lo digo como ex alumna "Javierina".
Ahora bien, cada quien puede interpretar su paso por un liceo emblemático como lo estime, y quedarse con lo que quiera para sus vidas. Por eso el discurso de Benjamín González, generó tanto revuelo.
Frente a estas reflexiones del joven egresado, Cambio21 se preguntó ¿qué opinarán ex Institutanos del "primer foco de luz de la nación" (como dice una estrofa de su himno), sobre el discurso de Benjamín González?.
El ex ministro Sergio Bitar señaló que "lo leí y me gustó. Primero tiene la capacidad de crítica de una sociedad que habla bien de él y a pesar de sus críticas habla bien del colegio. Segundo, comparto su visión de la distorsión cultural que envuelve a la sociedad chilena y también penetra al Instituto. Esto es destacar y valorar solo en nombre de lo individual, sin visión de los intereses de la comunidad.
"Me llamó la atención que se le requiriera un texto previo y se limite por tanto una cierta libertad que el Instituto debiese resguardar en los alumnos, tiene que confiar en ellos. Sus apreciaciones políticas uno las puede discutir pero lo primero es la libertad para exponerlas y puede también existir como alguien lo notará, errores históricos de fechas sobre los referentes a los temas del salitre y la matanza de Santa María que fue en 1907, después del gobierno del presidente Pedro Montt, pero son detalles".
Por último, Bitar comenta "lo importante es que tenemos que resguardar en nuestros jóvenes la capacidad de análisis crítico de la sociedad, tenemos que resguardar la libertad de expresión y aplaudo su coraje, de decir lo que dijo en un tono que por lo demás considero respetuoso y bien escrito".
Franco Parisi dijo "es normal que eso ocurra; siempre en las graduaciones el alumno que da el discurso por lo general es un poco desenfadado y quiere hacer cambios y es normal... pero lo hacen con cariño a pesar de que uno puede decir "pero como si le estas dando super fuerte".
"Hay que destacar dos cosas. Primero la valentía de decir las cosas y segundo que el Instituto Nacional sigue siendo el primer foco de luz de la nación a pesar de que no tengan los recursos ni la prestancia de anteriormente, sigue siéndolo y hay que potenciar la educación pública".
Por último, Parisi comenta que "ojalá que esté equivocado el alumno que hizo el discurso, porque ojalá que tengamos el presidente del Instituto Nacional Nº 19 y que sea yo. En el video se escucha a los alumnos que están grabando decir "Golborne no poh, que sea Parisi" y comparto algunas críticas sobre Golborne en relación a que el tuvo dos grandes jefes que fueron Paulmann y Piñera. Por lo tanto nosotros necesitamos un presidente mucho más independiente y en mí caso trabajé más de 20 años para Andrés Bello (Universidad de Chile) y él está muerto y no me va a pedir ningún favor", señaló.
Ricardo Solari: "creo que el discurso hace mérito de la tradición de pensamiento crítico que ha caracterizado a los estudiantes del Instituto Nacional desde siempre. Por tanto me parece que es un texto que es una contribución a mirar algo que es considerado un paradigma en sus claros y oscuros. Desde ese punto de vista, me parece una contribución".
"Críticas al Instituto ha habido muchas veces de parte de muchos estudiantes al igual que visiones críticas. Muchos de los cuestionamientos son más generales, a lo que es el sistema escolar. En general el sistema tiene una estructura de discriminación y de formación bajo ciertos principios y valores que son afines a los modelos dominantes, pero es aplicable al Instituto y a cualquier establecimiento".
Por último, Solari señala que "me parece que nada de esto debiese provocar revuelo. Se nota que el alumno que lo escribió es una persona de gran capacidad y tiene una apreciación de la realidad de muy buen nivel", concluyó Solari.